miércoles, 6 de abril de 2016

Está volviendo la Paralela?

¿Vuelven? ¿Nunca se fueron?





Vuelven a nuestros campos las escopetas "paralelas"...

La escopeta paralela o yuxtapuesta es la "madre de las escopetas" y son las herederas de los mosquetes y/o trabucos.  Realmente fue concebida como la primera arma de repetición al permitir dos disparos consecutivos (incluso simultáneos, hoy llamado "hacer una guitarra") sin necesidad de recargar el arma.

Las primeras escopetas paralelas contaban con martillos a la vista, conocidas como escopetas de "perrillos", donde había que amartillar la escopeta antes de poder dispararla y contaban con dos gatillos, uno para cañón.  El gatillo delantero dispara el cañón derecho, normalmente el de choke mas abierto y el gatillo trasero, dispara el cañón izquierdo, mas cerrado,  Estaban concebidas para cazar a la mano con o sin perro, de manera que la presa se alejaba de nosotros, dándonos la opción de mayor apertura de los plomos a 20-25 metros en el primer disparo, y el segundo dando esa similar apertura a 35-40 metros.
Realmente se las llama paralelas, pero la realidad es que no son exactamente paralelas ya que los cañones siempre convergen en un punto.  Ese punto oscila de los 40 metros a los 60 metros, aunque el "plomeo" comienza a solaparse a unos 20 metros.  De hecho cuando esa convergencia es demasiado acusada, hablamos de escopetas "bizcas", aunque realmente yo no he visto nunca un caso real, y me parece que se trata de mas bien de un mito de sus detractores.

Las escopetas paralelas tienen muchas y diversas variaciones, siendo la mas notable la pletina larga o la media pletina.  A modo de explicación sencilla diremos que las escopetas de pletina larga suelen ser mas refinadas y costosas debido a una mayor complejidad en el mecanismo de disparo.



En mi opinión, el tiro con una escopeta paralela es mucho instintivo que en el resto de tipos de escopeta, de hecho en una secuencia rápida, el segundo disparo, de ser muy seguido, es prácticamente a "donde dé".  Los cazadores de "paralela" suelen cuidar mas sus disparos y dejan al animal cumplir para asegurar al máximo el disparo.  No suele tratarse de "quema cartuchos", suele tratarse de cazadores experimentados que buscan asegurar al máximo.  (No estoy diciendo con esto que los usuarios de otro tipo de escopetas no actúen de esta manera, ni mucho menos)
Al estar colocados los cañones paralelos al plano horizontal (suelo), permiten una mayor visibilidad lateral y la solista, que es la pieza realzada que cubre la unión de los cañones,  compone el elemento principal de puntería y alberga el final de los caños, el punto de mira.  Lo habitual es que sea una bola de metal o una bola blanca, no suelen verse puntos modernos de fibra o similar.

Una de mis joyas, pletina larga, culata inglesa... 

Si encaramos cómodamente la escopeta, el disparo perfecto se realiza con los dos ojos abiertos.  Se suele decir que este tipo de escopetas "patea" mucho mas que cualquier otro tipo de escopeta.  Seguramente porque las escopetas paralelas tradicionales no disponen de ningún mecanismo de re-aprovechamiento del retroceso para recargar o re-amartillar el arma.  Además, el plano de retroceso, por la ubicación de los cañones, es mucho mas perpendicular a nuestro cuerpo, lo que hace que nos "traguemos" mas el retroceso.

En el mercado americano son conocidas como "coach gun" (escopetas de diligencia) y tienen su mercado, pero este tipo de escopetas son de cañones mas cortos y normalmente de perrillos, no aptas para caza.
Es el mercado europeo, concretamente Reino Unido, España, Francia y Alemania (en menor medida) donde realmente tienen su autentica cuna.  Hoy por hoy, se ven cada vez mas en los cotos de caza menor, y son muchos los cazadores que cuentan con una de estas armas en su armero.
Son armas clásicas, sencillas en apariencia, elegantes y de manutención sencilla por parte del propietario, aunque es conveniente llevarlas a un buen armero cada uno o dos años para su revisión. Suelen dar cierto reparo por confundir algo clásico con algo "viejo" y el doble gatillo (las hay de un gatillo, pero normalmente son fabricadas para tiro pichón) también da sensación de trasnochado o complejo.

Maravillosa Grulla

 Preciosa Garbi
Ugartechea de media pletina especial jabalí (estas escopetas suelen tener cañones rallados y alza)

En cuanto a fabricantes, su cuna noble fue Inglaterra, y aun hoy, las Purdey o las Holland & Holland siguen siendo la "realeza" en los fabricantes de este tipo de armas.  España, y concretamente Eibar, albergaban a la "nobleza" en los fabricantes de escopetas "finas": Sarasketa, Ugartechea, Grulla, Zabala, Aguirre y Aranzabal (AYA), Zubillaga,...  Una pena que hoy queden cada vez menos, y volcados en la fabricación de escopetas a medida.  Joyas, verdaderas joyas fruto de su mejor hacer a mano.

Yo cuento con dos maravillosas "paralelas", una de pletina larga, culata inglesa y otra de media pletina con pistolet.  No son pocas las mañanas que he dejado a sus "compañeras de armero" y las he llevado a inolvidables mañanas en busca de las patirrojas o de las fenomenales codornices.  He de decir que siempre vuelvo con con una sonrisa de oreja a oreja, profundamente agradecido y orgulloso de ser su propietario.


martes, 5 de abril de 2016

Berettero o Benellista?

Las escopetas, a igualdad de calidad, son un autentico mundo de gustos y costumbres.  Quizás una de las discusiones mas habituales entre los cazadores usuarios de escopetas semiautomáticas es ¿Cuál es mejor: Beretta o Benelli?





Por recordar el concepto a los más noveles:  una escopeta semiautomática es aquella escopeta de repetición de un solo cañón que dispone de un depósito de 2 o mas cartuchos (en españa está limitado a 2) y un sistema que aprovecha la potencia del disparo para recargar el arma de manera automática.  Es decir, cada vez que se aprieta el gatillo y se produce el disparo, el arma recarga otro cartucho y estamos en disposición de realizar otro disparo sin intervención manual del tirador.

Existen dos sistemas de "recarga automática": por gases y por inercia.


Sistema de Gases

Casi todas las escopetas semiautomáticas utilizan el sistema de recarga por gases.  Beretta, junto con Browning, Fabarm, etc, han perfeccionado este sistema muchísimo, siendo a día de hoy, armas no solo robustas y ligeras, si no también muy efectivas en su recarga.
Este sistema funciona de la siguiente manera:  Al efectuar el disparo, el percutor golpea el pistón produciendo la combustión de la pólvora y por tanto la rápida expulsión de los gases.  Son estos gases los que empujan el taco y los perdigones por el cañón.
El sistema aprovecha la salida de estos gases a través de uno o mas orificios en la parte inferior del cañón (cubierto por el guardamanos), empujando una vávlula de gases (o pistón) en sentido contrario a la salida del disparo y accionando el cerrojo que expulsa el cartucho disparado y cargando el nuevo cartucho introduciendolo en la recámara y activando el percutor.

 Detalle del funcionamiento de expulsión de gases y el "pistón"

Corte y ubicación de la salida de gases que acciona el pistón.

La "pega" de este mecanismo es que funciona perfectamente siempre y cuando esté limpio, sea el cañón y esos orificios, el pistón y el eje por el que se mueve.  Funciona también estando moderadamente sucio, pero esos gases, llevan un residuo de pólvora quemada que se adhiere y al final va formando una capa que de no limpiarse correctamente, dará problemas y producirá que el arma se encasquille.

Sin embargo, este sistema está tan evolucionado, que el arma funciona perfectamente con cartuchos de baja carga. (por ejemplo 24 grs en calibre 12).

Sistema Inercial

Las Benelli aportan el sistema de inercia.  Este sistema aprovecha la fuerza del retroceso para efectuar la expulsión y la recarga mediante un sistema compuesto por muelles (muelle de inercia).  La enorme ventaja de este sistema es que no se ensucia, ni de cerca, tanto como el de gases.  Al no haber acumulación de restos de pólvora quemada, en general tienen fama de ser tremendamente duraderas y efectivas.

Detalle del sistema de recarga de Bennelli por inercia

Sin embargo, a alguna, los cartuchos de menos gramaje (24 grs o incluso 28 en las mas veteranas) a veces se les "encasquillan"...

Ambas, Beretta y Benelli son armas de tradición y cualquiera de las dos, es una buena elección (con permiso de las muchas otras que hay en el mercado).

En mi caso...  soy propietario de una Beretta que ha disparado muchísimos cajones sin dar nunca un problema.  Cierto que la limpio cada vez que la uso.
Me atrae muchísimo el sistema Benelli y por algo será que hay muy pocas en el mercado de segunda mano....

No vendo mi Beretta por nada, pero si comprase hoy una escopeta semiautomática, seguramente seria Benelli..

viernes, 11 de marzo de 2016

La leyenda de una escopeta...

Hoy mi amigo Javier  me ha relatado una de esas historias en las que un arma queda impregnada de algo que transforma el acero y la madera en algo mas.

La historia reza así:

En un pequeño pueblo de aquella España de los 40, concretamente en la provincia de Ciudad Real, donde había mucha diferencia entre los que tenían mucho y los que casi nada tenían, había una humilde aunque honorable familia en la que la caza, formaba parte de su forma de vida.  
A la vez que ganaban unos dineros ojeando la caza a los "señoritos de Madrid y de Ciudad Real", el cabeza de familia garantizaba que su familia comiera carne, gracias a una escopeta de caza..   Uno de estos 8 hijos, aprendió seguramente a vivir la caza como algo natural y necesario.  Con esos ojos de niño, y con su padre como referente, aprendió a soñar, y soñaba con tener su propia escopeta de caza.  El poco dinero que conseguía, lo guardaba para poder cumplir su sueño: tener su propia escopeta de caza.
Después de muchos esfuerzos y de guardar con tesón cada perra gorda, pudo finalmente comprar esa escopeta de sus sueños.  Una preciosa escopeta de perrillos del calible 410.  Por miedo y para evitar ser "confiscado" por destinar su "todo material" en una escopeta, decidió guardar su escopeta en el establo.   Quiso la mala suerte y el enemigo feroz del campo, que ese establo ardiera como una tea.  Me puedo imaginar a ese pobre niño conteniendo sus lagrimas de rabia y desolación al ver su sueño arder entre las llamas...
Una vez sofocado el fuego, seguramente removió cada tizón en busca de sueño armero... pero no consiguió dar con ella, dándola por perdida para siempre.  Este niño creció añorando cada dia y en silencio, la  perdida de su tesoro armero.

Las cosas de la vida y el destino caprichoso quiso que hace unos años, falleciera un buen amigo (y apasionado de las armas) de Javier.  Este, había dispuesto que al fallecer y sabiendo la pasión de Javier por las armas, quiso que una de sus armas, pasase a ser de el.  Concretamente, una bonita escopeta "vieja" de perrillos del 410.  Este hombre la había recibido como parte del pago por un asunto que no viene a cuento, pero quería que fuese para Javier.

Javier la guardó durante unos años, esperando el momento de poder "bautizar en la caza" a sus hijos con ella.

Una vez mas, el destino caprichoso quiso que por cosas de trabajo, Javier entrase en contacto con una persona gran amante de la caza y de la caza "en familia".  Esta persona invito a Javier y a su hijo a una jornada de caza en su finca en compañía de su familia.  Llegado el dia del encuentro, allí estaba toda la familia de la finca, desde el abuelo, hasta el mas joven de los nietos.  Seguramente hablando de caza y de cazadurias, Javier se fijo en el abuelo de la familia, al que describe como un hombre recio como un roble y amante del campo y de la caza.  Después de hablar un rato, y seguramente con la ilusión de una jornada de caza, el hijo de Javier, le contó a este anciano, que hoy "estranaba" su escopeta "nueva" de caza.  El anciano le pidió que se la enseñase... El hijo de Javier corrió al coche por ella...  La desenfundo y se acerco hacia el anciano.  Estando aun a una distancia de unos metros, todos se quedaron paralizados al ver que el anciano se levantaba de golpe y sus ojos se llenaban de lagrimas.
Sin mediar palabra, el anciano se introdujo en la vivienda en silencio mientras todos callaban y se miraban por la situación tan extraña y a la vez tensa.  Unos instantes después, el anciano volvió a salir de la vivienda, esta vez con la llama de ilusión en sus ojos y un papel amarillento en las manos.
Al llegar al grupo les relato la historia de su sueño, de su arma, del fuego que le arrebató su tesoro y con ojos apasionados les dijo: creo que esa es mi escopeta!




Cosas del destino... comprobaron la numeración del arma y coincidía!!!! Era su escopeta!.  

El hijo de Javier, aunque niño, con gesto torero, le espeto al anciano: 
- entonces, esta escopeta no es mía, es suya, aquí la tiene.  
El anciano, seguramente sonrió profundamente y mirándole a los ojos a "Javier Jr"(el hijo de Javier), le dijo: 
- no, esa escopeta se fabrico para que llegase a tus manos y fuera tuya.  Y ademas para que algún día la uses tu con tus hijos.

Este es uno de esos casos donde un arma deja de ser acero y madera y pasa a ser algo mas que una escopeta...  Gracias Javier por compartir...