martes, 8 de abril de 2014

El corzo - El duende del bosque

El corzo es de la familia de los cérvidos y es el hermano menor por así decirlo.
Es sigiloso, precavido aunque muchas veces audaz y hasta confiado.  Muy atento, sobre todo al movimiento y con un oído endiabladamente fino.

(Maravillosa foto de la Asociacion del Corzo Español)

Si se siente seguro, puede aguantar en su escondite completamente quieto y salir a la carrera en el momento menos pensado.  Cuando sale a la carrera, es inalcanzable, siendo el animal más rápido que he visto en los montes y campos españoles.  Es bastante común que en monterías, salten corzos y los perros los persigan.  Normalmente, agotan a los perros por su capacidad de subir pendientes endiabladas a una velocidad que parece de mentira.

A mi realmente, me apasionan todos los animales, pero tengo que reconocer que el corzo es realmente bello.  De silueta armoniosa, porte esbelto, ojos grandes y mirada tierna, casi triste.

(las parte de la cuerna del corzo)

Os dejo algunos enlaces donde nos dan mucho más detalle de estos estupendos animales.
Asociacion del Corzo Español
La caza del corzo es por rececho, es decir, ir a la "búsqueda" del animal.  El éxito se garantiza si sabemos de su hábitos.  Las zonas donde duerme, donde come y bebe, y los encames.  Esto requiere o ir acompañado de alguien que conozca y observe bien la zona, o de un importante trabajo de campo en el que peinaremos la zona, armados de prismáticos.

El día del lance, es importante llevar el peso justo, solo lo necesario.  No es necesaria mucha munición, yo suelo llevar 4 balas.  Unos prismáticos, el rifle (los puristas suelen utilizar rifles mono tiro) con un buen visor con bastantes aumentos y un calibre que tenga una buena rasante (que mantenga una trayectoria lo más plana posible).  Realmente, al ser rececho, y ser un animal mediano y no demasiado duro, es recomendable utilizar calibres más pequeños que en montería ya que estos primeros, tienen condiciones balísticas mejores para este tipo de caza.  Un 222, un 243, un 270... aunque también muy validos son los 30.06 o los 300 con balas de poco gramaje.
Importante también llevar un trípode o pie para apoyarnos ya que tendremos un disparo nada más y se trata de asegurar el disparo en la medida de lo posible.  A distancias largas acertarle a un corzo rompiendo el monte es como acertar una quiniela de segunda división!

Lo primero, tener el rifle a tiro, mejor a 200 metros.
Lo segundo, conocer el terreno y las querencias del animal.
Lo tercero, tener la paciencia suficiente para no precipitar el disparo.

No por nada le llaman el traga balas...  Muchos son los casos que un corzo pegado en un lugar letal de su cuerpo ha huido desplomándose muchos centeneras de metros en el bosque.

En una ocasión, hace no demasiado, en plena montería, oía un animal venir a la carrera entre las jaras a mis espaldas.  En frente, tenía un sembrado con una encina muy frondosa.  Preparado y semiencarado, veo aparecer entre las jaras al "duende" a la carrera!  Sonrío, le sigo con la mirada bajando el rifle, lo veo ir derecho a la encina, atravesarla de un salto y en pocos brincos desaparecer al otro lado del sembrado.  Muchos segundos después, aparecer dos podencos estupendos con la lengua fuera con cara de: "por donde se ha ido?"

Estupendo animal, bello, sereno, elegante, así es el duende.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.