Este viernes nos dabamos cita un pequeño pero "selecto" grupo de amigos twiteros. Una amistad que surgió en Twitter, fruto de la pasion por la caza, nos fue uniendo el compartir información, lances, ilusiones, pasion por el campo, bromas y pequeñas grandes aventuras.
Aunque faltaron muchos, y los que faltaron son "grandes" de la caza en España, la representación era magnifica, Iñigo, Javier y el gran Raul. A Iñigo le acompañaba un amigo y gran tirador (aunque no se pudieron quedar mucho rato), y en mi caso, me acompañaba Ian, ya consolidando su afición creciente, en unos maginificos resultados.
El punto de encuentro era mi habitual Somontes, en la cancha de Ojeo.
La tarde fue divertida a rabiar y anecdotas aparte, creo que hay dos temas muy interesantes que me gustaria compartir: la diferencia en el tirador acostumbrado al tiro de caza vs el tiro al plato y el tiro en dias calurosos.
Vamos a por el primero de los temas. Teniamos varias escopetas listas y dispuestas esperando a que los discos anaranjados surcasen los cielos: una Benelli, dos Berettas semiautomaticas y una especial plato, una Laurona superpuesta... y variedad de cartuchos, desde los estupendos JG, Jualgo a los mas economicos Decathlon.
Tanto Raul como Javier, como Iñigo, son tres grandes cazadores: habituales en los lances de mayor y menor, donde los disparos van desde el tiro de cortadero a "tenzazon" en una monteria, al tiro reposado de un rececho o una espera, o desde el disparo sin tiempo a pensar de una perdiz o una liebre, al disparo mas asentado, casi "degustado" a una paloma que nos va entrado al puesto...
Raul y Javier, eran "noveles" (si ellos me lo permiten) en el tiro al plato y tras indetificarles las máquinas, los primeros platos, los esperaban con la guardia alta... sus primeros disparos, traseros en practicamente todos los platos (los platos engañan al mas avezado cazador por su tamaño, distancia y velocidad)... tras los habituales, adelanta el tiro!, corre la mano! pega tiron! y esperar a los platos con la guardia baja, comenzaron a romper con bastante consistencia. En el caso de Raul, llevaba una estupenda Beretta de plato con chokes de * y **, rompio platos verdaderamente imposibles por la distancia a la que ya se encontraban! y puedo decir que se fue con una estupenda sorrisa de oreja a oreja que ni dibujada por el mismisomo dueño de Armeria la Gacela en Avila...
En el caso de Javier, la cosa fue muy interesante y la que realmente me hizo reflexionar sobre las distintas modalidades y las diferencias. Le costaba alcanzar los platos y seguramente estaba hasta nervioso cuando los pedia... lo mas curioso, es que los que "robaba" (disparar al plato una vez el tirador ha fallado sus dos disparos) los rompia con mucha soltura y consistencia... despues de unas cuantas bromas, y reflexionando, el cazador, no llama a la pieza, la esta esperando en todo momento, y a la vez nunca... el disparo es completamente instintivo (salvo en modalidades de rechecho, espera...) y esta preparado, pero sin estar en tension... Comentaba Javier y no sin razon, que la proxima vez, no quiere saber de donde saldran los platos, y los esperara con guardia baja... sin duda, tendra un cartel mucho mas abultado.
En ambos casos, tanto Raul como Javier se fueron con su sonrisa puesta, con la adrenalina descargada y con ganas de volver!
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