Fallos con escopeta - Con la mira en el descaste y la media veda

Calentamos motores para la primera cita cinegética de la temporada, el descaste de conejo, seguido de la media veda.

Aparte de revisar nuestras armas y documentación, es importante la preparación de la temporada para maximizar nuestros aciertos en las jornadas de caza.

Veamos los fallos comunes en el tiro con escopeta y su posible "remedio":

• El mas común: Disparos retrasados o traseros.  Seguramente supone la mayoría de los fallos en los disparos con escopeta, adelantar poco el tiro.  La clave es la práctica y mas práctica.  Un buen ejercicio es acudir a tirar al plato.  Lo mas aconsejable son las modalidades de recorridos de caza o el compak sporting.  En estas modalidades se disparan a platos con trayectorias transversales a nuestra posición, o que se acercan a nosotros, relativamente similares a nuestros lances de caza en este tipo de jornadas de media veda.  Es importante señalar que muchos aciertos en estas modalidades, no son garantía de éxito completo en caza:  
• La razón principal es que los platos llevan una trayectoria y velocidad uniformes y por tanto, en cuanto les coges el "tranquillo", no fallas.  La caza no es constante generalmente ni en velocidad ni en trayectoria.
• La segunda razón es que cuando tiramos al plato, o bien lo llamamos, o lo estamos "esperando" y por tanto estamos preparados.  En la caza, maxime en mano, podemos pasar muchos minutos sin oportunidad y luego sucederse lances consecutivamente.
• Falta de preparación al lance.  Muchas veces en las jornadas de caza o bien en puesto o en mano, perdemos la concentración y bajamos la guardia.  Esto produce que iniciemos la maniobra de disparo con retraso y perdamos el lance.
• Mal encare.  En multitud de ocasiones, por la prisa o la tensión del momento, nos encaramos mal la escopeta, o bien dejándola baja, o apoyándola en el brazo en lugar del hombro o metiendo la cara demasiado.  La mejor preparación es la práctica del encare con la escopeta descargada.  Encarar una y otra vez, hasta que sea un movimiento completamente mecánico y consistente.
• Mala elección de carga y cartucho.  Otro error común.  Aquí tenemos varias combinaciones:
• Poca o Excesiva Carga.  Los hay que por costumbre utilizan una determinada carga para todo, o los hay que por evitar el retroceso, cargan municiones de poco gramaje.  Por contra, tenemos aquellos que ante la duda, 36 gramos para todo ... mas perdigones, mas aciertos...  Cada modalidad tiene su gramaje adecuado, y aunque ir bajo o alto solo va a aumentar nuestros porcentaje aciertos o fallos, es importante recordar que como norma general, a mayor gramaje, menor velocidad de perdigones y mayor apertura temprana del disparo.
• Mala elección de la dimensión del perdigón.  Cada uno tenemos nuestras costumbres y aunque hay indicaciones para cada especie en función del momento en la temporada, es aconsejable utilizar una munición apropiada para cada especie.  Disparar a torcaces con 11ª es tirar el dinero, fallar todo y seguramente herir animales sin sentido; y disparar a zorzales con 4ª también.

• Mala colocación.  Aunque la caza no es "tiro de salón" y por tanto la posición no siempre puede ser perfecta, es aconsejable en la medida de lo posible tratar de disparar con nuestra pierna izquierda adelantada y levemente flexionada y el peso ligeramente adelantado. (para diestros).  Una buena colocación nos permite un swing limpio y acompasado, sin tirones.  El movimiento de seguimiento de la pieza debe partir de la cintura y tratar de mantener inmovil el torso y la cabeza, girando sobre la cintura.

• Apuntar demasiado.  Un error muy común en tiradores de plato o cazadores de mayor que van a caza menor es apuntar demasiado.  El tiro con escopeta en caza debe ser bastante intuitivo y mecánico.  No es un disparo de alta precisión.  Apuntar demasiado significa perder tiempo y metros y normalmente, perder la distancia idónea de muerte.

• Disparar demasiado lejos.  Un error de principios de temporada y de "novatos".  Las ganas nos pueden y juzgamos mal las distancias y en lugar de dejar cumplir al animal, disparamos o bien cuando (por ejemplo) la paloma aun está demasiado lejos, o bien un conejo que nos queda demasiado largo...  La distancia efectiva optima en disparos de escopeta va desde los 20 a los 40 metros en función del cartucho y de los chokes.   Disparar a una paloma a mas de 50 metros, salvo choke cerradisimo, adelanto optimo y cartucho que cierre mucho, suele ser fallo garantizado.

Estos son los fallos más comunes y sus posibles soluciones.  La clave es la práctica nos hace mejores, no lo olvidemos.

A la caza del "duende"

Sábado, 06.45 de la mañana, punto de encuentro con mi amigo en la plaza del pueblo.  La claridad del día irrumpe y está comenzando a clarear.  Puntuales a la cita, metemos todos los aperos en un coche para hacer el menor ruido posible.  Después de unos minutos, estamos transitando por un camino entre siembras con una ladera verde rabiosa frente a nosotros.
Al bajar del coche la estampa es idílica, un frescor que hace sentir el aire en los pulmones, algún canturreo aislado de algún tordo madrugador y verde, mucho verde.  Siembras bastante crecidas por las incesantes lluvias, monte bajo y alguna encina salpican el paisaje.

En riguroso silencio, cargamos ligero mi equipo:

• Prismáticos: Delta Optical Titanium de 10 aumentos con campana de 56.  A mi juicio su relación calidad - precio es sorprendente. Escribiré entrada específica.
• Rifle y calibre: Winchester Modelo 70 en 300 Winchester Magnum.
• Munición: Norma Tip Strike con punta de plástico en 170 grains.  La verdad es que funcionan fenomenal y mis pruebas tanto en montería como en rececho han resultado "definitivas".
• Visor: Kahles Helia 5 en 2,4-12 x 56.  Una joya, realmente una joya.  De una nitidez casi irreal, destilan altísima calidad por los cuatro costados.  Los llevaba montados sobre unas monturas Warne fijas.
• Vara para apoyar

 Ajustando el visor con las monturas fijas.

En cuanto a ropa, elijo un "soft shell" para frenar la suave brisa que peina los arboles, pero que estando quieto y a estas horas, te deja helado.

Caminamos en silencio unos minutos escuchando alguna ladra de corzo, cosa que dibuja una sonrisa en mi cara.  Nos situamos al borde de una siembra, justo en un terrraplen ascendente que sirve de perfecta cobertura para no estar tan expuestos.

Escudriñamos los bordes "sucios" de la siembra prismático en mano... Mi acompañante, conocedor de la zona, me señala un borde de la siembra que aunque está muy alta, al enfocarlo detenidamente, veo un "lomo" que a un no conocedor de la zona o sus querencias, le habría pasado desapercibido...  La distancia roza los 250 metros.  El duende es un animal temeroso, pero con el viento a favor, sin hacer ruido, y a estas horas, seguramente nos permitirá acercarnos unos metros.

Me adentro en la siembra agachado, rifle en mano, camino despacio, en silencio absoluto, sintiendo cada roce de la hierba en mis piernas... Cada 20 pasos me detengo y rodilla en tierra, oteo la zona para revisar que no ha habido cambios..  El ritual se repite varias veces y comienzo a notar el latido de la tensión previa al lance.  Esa emoción inexplicable imposible de expresar con  palabras.  Finalmente y ya bastante cerca, quizás 70 metros, veo que el corzo a levantado su cabeza y quedo inmóvil, de piedra, casi sin respirar...  Está fuera de la siembra, justo en una zona plana pero no sembrada.  El macho mira en mi dirección...  Segundos interminables hasta que veo que vuelve a bajar la cabeza....

Encaro mi rifle rodilla en tierra, y quito el seguro, 6 aumentos, veo perfectamente el lomo del animal asomar sobre la hierba... espero unos segundos que se hacen interminables... Dos torcaces rompen la paz del instante, saliendo de una encina a medio monte, con bastante escandalera.  El "duende" se sobresalta y levanta la cabeza... la cruz de mi visor se sitúa a escasos centímetros por encima del borde de la hierba, centrada en el codillo... sin pensarlo demasiado, y entornando mi ojo derecho aprieto progresivamente el gatillo y como si se tratase de un trueno del averno, el disparo fulmina al animal, que cae sin sobresalto en el mismo sitio.  Me levanto como un resorte, con una sonrisa de oreja a oreja y miro hace mi amigo, que levanta las dos manos en señal de victoria.  Me doy  cuenta que está bastante lejos y espero a que se acerque a mi improvisada postura.
Al llegar a mi altura me dice: Precioso lance! ahora bien, casi te acercas hasta acariciarlo!  No era consciente de haberme acercado tanto hasta este momento.
Comenzamos a andar hacia el animal y al llegar observamos que ha quedado tendido sobre su lado izquierdo y que el disparo ha sido fulminante.  Se trata de un macho que aunque un pelín joven, ya luce una preciosa y simétrica armadura.

Aunque se le ve sano y luce un pelaje uniforme y precioso, mi amigo me comenta que se ha dado algún caso de "gusano", así que siguiendo su consejo, lo dejamos para revisar por el veterinario para ver si podemos aprovechar la carne.

Un lance inolvidable en una mañana de ensueño.

El rececho al corzo, disparos largos o disparos cortos?

Estamos en el cenit de la temporada de corzo aunque seguramente y después de las intensas lluvias de mayo, en el momento más difícil por la altura de los cultivos y espesura de monte bajo.

Existe un pequeño dilema entre los amantes del rececho al corzo: ¿disparos largos incluso a 350 o 400 metros, o disparos cortos, tratando de acercarnos al animal lo máximo posible?  Cada uno tiene su preferencia, pero las dos "modalidades" tienen su dificultad y su "arte".

El rececho a larga distancia

En este tipo de rececho los disparos son a grandes distancias, o bien porque los animales estan muy "recelosos" o por la imposibilidad de acercarnos.  Consideraciones:

• Calibre: Normalmente cazaremos con calibres de buena rasante: 270 WSM, 7mm, 300 WM etc.  Buscaremos balas de pocos grains para máximizar el coeficiente balistico, mayor velocidad y menor caída del proyectil.  Tendremos presente la balística de nuestro proyectil, sabiendo su caída o elevación en función de la distancia.  Si no disponemos de torreta balística en nuestro visor, es muy recomendable preparar una "chuleta" con estos datos y llevarla a mano, incluso pegada a nuestra culata.
• Punta.  Aconsejables puntas duras y aerodinámicas.  Las puntas plásticas también son apropiadas.
• Óptica "Auxiliar": Imprescindibles unos buenos prismáticos, con 10 o mejor 12 aumentos. Es muy recomendable disponer de un "telémetro" para medir las distancias y saber donde apuntar o cuanto corregir la elevación.  
• Visor.  Elemento clave en disparos a larga distancia.  Aconsejable óptica de claridad para asegurar la máxima nitidez.  En disparos de hasta 250 metros, podemos "arreglarnos" sin problemas con aumentos visores de hasta 12x.  Para disparos muy largos, es aconsejable visores de mas aumentos, 20x seguramente es lo óptimo.
• Elementos de apoyo.  En disparos a larga distancia, es impensable disparar "a brazo", necesitaremos apoyo, y una simple vara de un apoyo quizás tampoco es suficiente.  Lo aconsejable es disparar o bien sentado o tumbado y con bipode acoplado al rifle.  Es aconsejable practicar el disparo tumbado con anterioridad, ya que si no lo has hecho nunca, no es tan sencillo como parece.  

En este tipo de rececho, la observación es fundamental.  Buscaremos las zonas de pasto del animal, siendo seguramente la madrugada el momento óptimo del día.  Esperaremos a que el corzo esté pastando y asentado, se sienta seguro y tranquilo para efectuar el disparo.  Buscaremos minimizar que un cambio de postura nos desbarate el lance.  Apuntaremos al cuerpo, zona tórax/codillo.  Importante observar el post disparo para ver si hemos impactado en el animal y de no haber  caído cual es su ruta de huida para posteriormente pistearlo.

El rececho a corta distancia

Quizás el rececho mas bello de todos.  Observando al animal y conociendo sus costumbres, buscamos acercarnos lo máximo posible.  Seguramente es bellisimo por tener el poso de la caza ancestral en la que la cercanía al animal era la clave entre el éxito o el fracaso.  Recuerdo con cariño una jornada de rececho al ciervo en la que terminé reptando por una siembra para poder acercarme hata los 60-70 metros.  Podía haber disparado a 120 metros con cierta comodidad, pero esos 30 metros por la siembra forman ya parte de mi álbum de fotos mentales.

• Calibre: Para distancias cortas, la rasante no es tan importante.  Podemos perfectamente afrontar el lance con munición desde el 243, 270, 30.06, 8x57 etc
• Punta.  Aconsejables puntas blandas y con rápida deformación.
• Óptica Los prismáticos son siempre necesarios en un rececho, 8 o 10 aumentos son suficientes y una buena campana para tener la máxima luminosidad y amplitud de campo.
• Visor.  A distancias por debajo de los 100 metros, podemos disparar incluso con miras abiertas.  Aconsejable 6 aumentos para estas distancias, por debajo de los 70 metros, mínimos aumentos.
• Elementos de apoyo.  Realmente no necesitamos demasiados apoyos y podemos dispara a pulso sin problema.  Si podemos apoyar, mejor que mejor.  Una vara nos servirá perfectamente.

La observación es también clave en este tipo de rececho.  Buscaremos la "ruta" de acercamiento mas apropiada, buscando zonas "silenciosas" y con abrigo para permanecer invisibles.   Este tipo de lances son "eléctricos", es decir, no perderemos la vista del animal en ningún momento, ya que es facilisimo que nos detecte y necesitaremos casi presentir cuando esto pueda suceder y estar preparado para efectuar el disparo a gran velocidad...  Atentos a sus miradas y hacia donde mira o si se queda fijo mirándonos...

En Monteria, cuando y cómo usar las miras abiertas

Aunque hoy las miras abiertas nos parecen algo "básico", en su momento representaron uno de los grandes avances tecnológicos en las armas tanto de guerra como de caza.

Inicialmente, las armas de avancarga no disponían de elementos de puntería, el cañón servia como referencia de linea de disparo.  El primer avance fue el punto de mira, muy similar a los puntos de mira presentes en nuestras escopetas.  Normalmente se trataba de un elemento metálico soldado en la parte superior del cañón.  En las armas de lujo, este podía ser de materiales preciosos como el oro y con la aparición de los cauchos adhesivos, se adoptaron materiales más creativos como puedan ser puntos de mira de marfil.

El gran avance fueron las miras abiertas, compuestas de dos elementos, el alza y el punto de mira.  El alza es la pieza que se encuentra más cerca de la cara del tirador, normalmente regulable en deriva (regulación lateral) y elevación (altura) y sue tener o bien forma de "U" o de "V" en su parte central.

 El punto de mira se sitúa en el borde final del cañón y en el 99% de los casos es fijo y está centrado de fábrica.

El objetivo es alinear el punto de mira con la "muesca" en forma de "U" o "V" del alza, y a su vez con el objetivo a disparar.

El objetivo es alinear centralmente el punto de mira y también asegurar que se mantiene el plano vertical del punto de mira con el alza.

Aunque este tipo de miras se han utilizado durante decenas de años para todo tipo de disparos, son idóneas para disparos cercanos ya que permiten un encare rapidísimo y nos permiten disparar con ambos ojos abiertos.

Consideraciones

• Para que encaremos bien el rifle, es muy importante que tengamos la longitud de la culata adaptada a nuestra envergadura.  Si el rifle nos queda "corto", veremos mucho "alza" y por tanto tendremos sensación de que esa "U" es demasiado amplia y moviendo levemente la cara veremos que tenemos mucho hueco lateral a cada lado del punto de mira.
• Un alza demasiado cercana del punto de mira complica el encare y nos perjudica en precisión a medianas distancias.
• Tradicionalmente, tanto el alza como el punto de mira estaban pavonados al igual que otras partes metálicas del arma.  Esto tenia la complicación en el caso de disparos en zonas de umbría o de noche.  Un problema muy común en estos casos, es no "encontrar" el punto de mira, obligándonos o bien a mover la linea de disparo a una zona clara o bien desencarandonos, haciéndonos perder el "momento de disparo".  Un remedio tradicional es pintar la parte central del punto de mira con pintura blanca.

A día de hoy, muchísimas marcas equipan a sus rifles con alzas y y puntos de ira con elementos de fibra en distintos colores.  Al aprovechar la luz de ambiente, estos elementos resultan bastante luminosos y facilita muchísimo el encare y la rápida ubicación y centrado del punto de mira.

Cuando quitar el visor y utilizar las miras abiertas?

La modalidad de caza donde este tipo de miras son mas útiles es la montería.  Encare rápido, vegetación muy tupida, disparo en movimiento...
Estas miras nos permiten mantener ambos ojos abiertos tanto en el encare como en el disparo y por tanto resultan óptimas en zonas de monte bajo y sucio donde vemos la res "a fogonazos" mientras escapa a la carrera.  Situaciones optimas para su uso:

• Puestos de cortadero con visibilidad baja o nula fuera del cortadero.  Aquí la clave es el disparo "rápido" y el encare rápido.
• Puestos de tiradero corto o medio con mucho matorral.  Uno de los problemas habituales aquí es situar la res en el visor al encarar el animal.  Las miras abiertas evitan que quitemos la vista del objetivo al encarar el arma.
• Zonas de gateras y pasos rápidos.  En muchas ocasiones, a pesar de tener tiraderos más o menos abiertos. tenemos zonas "calientes": o bien pasos o gateras por donde los animales pasarán a gran velocidad y tendremos pocos metros para realizar el disparo.  Aunque quizás los podemos encarar de nuevo mas lejos, siempre es mas efectivo y asumible un disparo a 30-50 metros que un disparo a 100 o 150 metros entre arbustos.

Alternativas al visor y las miras abiertas

A día de hoy, la tecnología avanza a pasos agigantados.  Tenemos distintas alternativas como visores holográficos que si bien no tiene aumentos, disponen de un sistema de puntería bastante eficaz y rápido, teniendo las ventajas de las miras abiertas.

Los fallos mas comunes en el tiro con Rifle y Visor

Siempre comentamos que en general, los cazadores Españoles realizamos pocos disparos de práctica.  Aun siendo así, tenemos fama internacional de ser los mejores tiradores a objetivos en movimiento.  Una de las causas de nuestros pocos disparos de práctica es que la reglamentación es bastante restrictiva en este sentido y solo se pueden realizar disparos de práctica en campos de tiro, y tampoco es que haya demasiados, ni estén preparados para disparos en movimiento.

En el campo de tiro, probando unas Barnes.

Cuando vamos al campo de tiro, normalmente vamos con la intención de o bien poner el rifle a tiro, o de asegurar que el rifle sigue a tiro (una práctica muy recomendable antes de las temporadas de caza).  La realidad es que el tiro en banco, no es un ejercicio comparable a la descarga de adrenalina y la pasión de los disparos en la caza.  De hecho puede resultar hasta desagradable.   Lo primero porque la postura no se asemeja a la de disparo en las jornadas de caza.  Lo segundo porque, aunque llevemos cascos, los estruendos de los disparos propios y ajenos, no hacen que sea precisamente un ejercicio relajado.

Con estas limitaciones y carencias, hay una serie de errores que se repiten en muchos cazadores y que podemos ponerles remedio:

• Miedo al "Scope Kiss"(saltarse la ceja con el visor), alejarnos demasiado del visor.  Una lesión tremendamente común es golpearnos por efecto del retroceso en la ceja o frente con el visor.  Normalmente resulta en un aparatoso corte, aunque nunca demasiado profundo, pero si bastante doloroso (física y mentalmente).  Yo diría que una inmensa mayoría de cazadores de mayor tenemos alguna cicatriz de "guerra" del visor.  Este "miedo" suele producir que apartemos la cara del rifle, incluso que no encaremos bien y nos alejemos demasiado del visor, multiplicando el efecto "paralax" o el efecto túnel del visor.

• Cerrar los ojos al disparar.  Seguramente por efecto del "sobre-calibre" (utilizar calibres muy potentes) y la falta de práctica, muchos cazadores cierran los ojos en el momento del disparo, Incluso milésimas de segundo antes, perdiendo justo el foco en el momento culminante del lance.  Realmente es un acto reflejo que se remedia con la práctica.  Un ejercicio muy aconsejable es realizar disparos de práctica en campo de tiro con calibres suaves, por ejemplo el .22 e ir subiendo de calibre paulatinamente hasta encontrarnos cómodos con nuestro rifle de caza habitual.  Podemos comenzar con el más bajo, un .22 o un .243 e ir subiendo.

• El "gatillazo".  Conocido como "golpe de gatillo".  Una vez mas, por miedo al efecto del retroceso, tendemos a prepararnos para el retroceso e incluso, de manera refleja, contrarrestar" su efecto en el momento del disparo.  Este fallo es muy común y suele resultar en disparos bajos o bien a izquierda o bien a derecha en función de si se es zurdo o diestro.  De hecho, he visto muchos cazadores que en el momento del disparo, y no habiendo quitado el seguro, se mueven en el momento de accionar el gatillo, cuando debería ser una maniobra suave y continua.  El remedio... la práctica.  

• En el caso de disparos en movimiento, no adelantar suficientemente el tiro.  Lo he comentado en varias entradas anteriores.

• Mal uso de las varas o trípodes.  Aunque son una estupenda ventaja, muchas veces y, otra vez por falta de práctica, se utiliza mal estos complementos.  No regulamos bien su altura y nos encontramos en posturas incomodas para efectuar el disparo.  Es importante regularlos a una altura cómoda, a mi me funciona bien colocar la "V" del soporte a la altura de mi hombro, quizás un pelín mas abajo.

• No encontrar el objetivo en el visor.  Para evitar este problema, es importante practicar una serie de rutinas:
• fijando un objetivo, encarar y desesncarar varias veces para acostumbrarnos a alinear el rifle en el encare.
• No usar demasiados aumentos.  Al magnificar mucho el area de disparo, perdemos amplitud de campo.  En recechos, es aconsejable empezar con 5-6 aumentos e ir subiéndolos en el visor una vez localizado el objetivo.
• En montería, tratar de mantener los dos ojos abiertos y utilizar pocos aumentos.  Esto nos permitirá seguir la presa y "acompañarla" hasta centrarla en nuestro visor.

• Disparar demasiado rápido.  Este fallo suele ser mas común en los cazadores que utilizar rifles semiautomáticos, aunque no solo se da en estos casos.  Realmente su origen es puramente psicológico.  El miedo a "perder" la pieza nos hace acelerarnos y disparar en cuanto la res "visita" la cruz del visor...  Cada maestrillo tiene su librillo... yo prefiero tratar de asegurar el  primer disparo, aguantando todo lo posible para tener el disparo lo más claro posible, y rápidamente me preparo para un segundo.  

Una vez más, cuanta más práctica, menos ojos cerrados, menos miedo al retroceso y mayor soltura.

Colocar el disparo - Puntos vitales

Sin duda una de las claves para maximizar nuestro porcentaje de aciertos, es saber colocar el disparo en los órganos vitales.  En primer lugar para asegurar un desenlace rápido y en segundo lugar, para evitar dejar animales heridos en el campo.

Sin duda, en disparos "estáticos", por ejemplo recechos o caza de ejemplares selectivos, es donde podemos colocar mejor el proyectil.  Sin duda los disparos en el cuello son los que resultan mas letales, produciendo un desenlace inmediato.  Lo cierto, es que estos disparos, son también los mas complejos ya que resulta un objetivo de dimensiones bastante reducidas.

En el caso del disparo en movimiento, sea al paso o a la carrera, debemos tener en cuenta también las zonas óptimas de impacto.  Normalmente en el argot cazador, nos referimos al "codillo" para señalar la zona que se sitúa justo tras la pezuña delantera y que indica más o menos donde se encuentra el corazón del animal.  Veamos un gráfico del sistema circulatorio del jabalí.

Una tendencia natural es a situar este "codillo" ligeramente superior a donde está ubicado el corazón del animal, concretamente ya en la zona pulmonar.  Aun siendo una zona de "impacto de muerte", un disparo ligeramente más bajo, tendrá un resultado inmediato.  El inconveniente en disparos en movimiento es que si nos quedamos traseros, impactaremos al animal en el vientre y eso resultara en un "impacto sucio", produciendo que el animal escape y sin duda tenga un desenlace lento, lejos de lo que un cazador debe siempre buscar.

Os adjunto tres gráficos muy interesantes con la ubicación de los órganos vitales:

En el caso del corzo, de no poder ubicar el disparo en el cuello (es un objetivo complicado), la zona del corazón se sitúa justo detrás del hombro de la pezuña delantera. 

En el caso de jabalí, vemos que la zona óptima se sitúa justo en la articulación de la pezuña delantera.

NOVEDAD - Escopeta Blaser F16

Ayer se presentó en el estupendo club de tiro Somontes la nueva escopeta de Blaser, la  F16.  Lo primero, destacar el vídeo de presentación realizado por Blaser, espectacular en todos los sentidos, merece la pena verlo... se puede aprender mucho si observamos bien...

De la mano de la plana mayor de Excopesa, con Pablo Gonzalez, director general, a la cabeza, nos explicaron los detalles y los puntos fuertes de esta esperadisima escopeta.  Les acompañaba también Robin Marx, Ingeniero de Blaser, participante en el diseño del arma.  Personalmente, me parece un lujo que uno de los diseñadores, te cuente de primera mano determinados detalles del arma.

Decía esperadisima porque es la entrada de Blaser a las escopetas premium de caza pero a un precio alcanzable para los bolsillos de los cazadores Españoles.  Imagino que Beretta estará temblando... y no solo por el precio.

En mis manos... Impresiones

Sensación de robustez y a la vez ligereza, de cañones tan pegados que parece que no es del 12.

• Cañones mates, aunque no es lo más bonito, busca la efectividad y tiene una doble funcionalidad... la primera evitar reflejos que pueden descubrir nuestra posición cuando cazamos en puesto fijo, y la segunda, al parecer es un baño patentado por Blaser anti arañazos.

• El gatillo es mecánico pero no se carga por el efecto del retroceso, lo que a priori hace el arma mas segura y así evitamos "guitarras" (dos disparos a la vez).  El tacto es muy bueno y efectivamente son muy "crispy", es decir, de efecto inmediato.  En mi opinión, quizás algo mas duro de lo que a mi me gusta, pero es algo solucionable.

• La báscula es sobria, quizás podría tacharse de un poco "aburrida", sin filigrana alguna, solo el emblema en plata F16.  Se trata de la báscula mas baja del mercado y eso implica una posición mas "acostada" sobre los cañones, mejorando el encare y por tanto los aciertos.

• La apertura y cierre son suaves y el sonido del cierre es fenomenal, un solido "CLUCK" que denota que es un arma de gran calidad.  Quizás un poco "duro" el cierre aunque sin llegar a ser molesto ... pero la escopeta era nueva...

• El guardamanos es fino y la pieza de demontaje esta justo en la junta con el cañón inferior, muy disimulada y elegante.

• El seguro no se activa automáticamente con el cierre o apertura de la escopeta.  Habrá quien diga "POR FIN!" y habrá algún detractor que no le guste.

• El selector de cañón está ubicado en la parte superior del gatillo y es muy cómodo y bastante intuitivo.  Habrá quien pueda considerarlo poco seguro, pero se puede accionar con el arma abierta y con el seguro puesto y no obliga a tocar el gatillo, aunque está cerca...

• La madera de la escopeta que yo probé era nivel 2 (base), solida, limpia, al aceite, con buen tacto y buen agarre sin ser demasiado abrasivo.

• El punto de mira en la versión de caza es el punto metálico de toda la vida.

En un momento determinado, tuve la enorme suerte de ver como Robin, montaba la escopeta que nos  habían mostrado desmontada en sus principales componentes... impresionate, un pasador y atornillarla a la culata y listo!

Mi conclusión:  Tiembla Beretta...  Escopeta sólida, de gran calidad, sobria, efectiva.  Si tuviera que buscar un símil diria que esta escopeta es el Iphone de las superpuestas...  su precio?  Justo bajo los 3.000 euros...

El respeto por la res abatida

Cada país tiene sus costumbres ancestrales relativas a la caza, en muchos casos, tradiciones de respeto por la res abatida.

Me llama mucho la atención una práctica que se va extendiendo por los países anglosajones, aunque originaria de Alemania.  Denominada "Der letzte Biss", es un vestigio de ritual en la muerte del animal.

Tradicionalmente en los países centro europeos se profesa un gran respeto por el animal abatido, Principalmente Ciervos, Sarrios, Jabalíes y principalmente, Corzos.  El ritual consiste en partir una rama con hojas verdes en dos trozos o ramilletes.  El primer ramillete se introduce en la boca del animal abatido, y el segundo ramillete, se humedece levemente en la sangre del orificio del disparo (no de la boca) y se coloca en la cinta del sombrero.  Este gesto simboliza en primer lugar, el reconocimiento y honor al animal caído, ofreciéndole su "última comida" y el segundo gesto, que su sangre, pasa ahora a ser parte de la nuestra.  La verdad es que es un gesto cargado de simbología y respeto por el animal; personalmente, me parece un bello gesto.

Es bastante habitual que los animales sean rodeados de ramas frescas en su presentación en las juntas de carnes.  Siempre en posturas respetuosas y "simulando" una postura de descanso del animal.  Todas las fotografías que se toman suelen ser muy cuidadas evitando demasiada sangre o que se vean los orificios de disparo.

Con las balas de monteria o de rececho no basta...

Aunque en España todos los cazadores nos tenemos por grandes tiradores, la realidad es que somos, con diferencia, el país que menos balas disparamos fuera de las jornadas de caza.  Si prácticamos el tiro con escopeta y tiramos varias cajas o cajones en un año,
¿porqué no hacemos algo similar con los rifles?

El arte de disparar, como todo, es una combinación de técnica y de práctica.  Un cazador que solo dispare las balas correspondientes a sus lances, (esto que voy a decir es polémico) seguramente no está suficientemente preparado ni tiene la práctica necesaria.  Cuanto más practiques el tiro, mejor dispararás.  Sencillo.

El tiro estático es teóricamente más fácil y requiere de menos práctica, es decir, el tiro en rececho, perdona más la falta de práctica.

El tiro en movimiento, sea en batida o en montería, requiere de práctica.  Los cazadores de menor practican infinitamente mas: o bien en jornadas de tiro al plato, o porque el numero de lances siempre es superior y por tanto se tiran muchos mas tiros.  El cazador de mayor, con suerte, dispara 20 balas en temporada, 40 los privilegiados.  Esto no equivale ni a una serie de plato...

Aunque el tiro en campo de tiro no es comparable al tiro en un lance, es importante practicar y acostumbrarnos a cada paso de los distintos pasos que tiene el disparo.
No se trata de tirar solamente apoyado, ¡para nada!  La mayoria de nosotros, vamos al campo de tiro, apoyamos el rifle y realizamos 5-6 disparos y nos damos por satisfechos....  Está bien asegurar que el rifle está a tiro, pero eso lo vemos en 3 disparos apoyados en banco.

Es conveniente por ejemplo acudir al campo de tiro y realizar disparos de pié y sin apoyos a dianas a 50 metros, incluso practicar en movimiento, es decir, hacer que "seguimos" al animal, y disparar cuando pasemos por el blanco.  O incluso practicar el encare y disparo rápido a 50 metros.  En el caso de contar con un campo de tiro con blancos en movimiento, estamos ante el mejor entrenamiento.
Importante aprovechar para practicar la recarga rápida en caso de rifles de cerrojo o palanca.

Estos sencillos ejercicios, tirando 3 o 4 cajas anuales (pueden ser munición de practicas de marcas mas económicas ya que a 50 metros no habrá grandes diferencias) nos harán mejorar de manera sensible nuestro porcentaje de aciertos.

El gatillo en las armas de caza

Tema crucial, en los rifles, vital para la precisión, en las escopetas, importantisimo para la comodidad y la suavidad en el swing o maniobra de disparo.

El gatillo en los rifles para montería o batida - Precisión controlada

Sin buscar ser demasiado técnicos, tenemos estas clases o características de gatillo:

• Recorrido.  Puede ser largo o corto.  Un recorrido relativamente largo y suave nos permite un mayor control sobre la presión a la hora de hacer el disparo.  Un gatillo muy corto es idoneo solo para casos de tiro complemtanente estático (recechos y no siempre).  El gatillo corto por excelencia es el gatillo de pelo, una leve presión y se produce el disparo.

Un gatillo antiguo, de mucho recorrido, seguramente de carabina de aire comprimido

• "Break Point" o punto de disparo.  Importante en combinación con el concepto de "recorrido".  Un recorrido relativamente largo con un "breaking point" a medio recorrido es, seguramente lo más apropiado para disparos en montería.  Por contra, los gatillos de pelo, tienen un "breaking Point" inmediato, sin recorrido, se presiona levemente y el gatillo no se mueve, se aumenta la presión y se produce el disparo.
• Presión.  Cada vez hay mas rifles que ofrecen la posibilidad de regular la presión a ejercer sobre el gatillo para que se produzca el disparo.   Los gatillos muy duros están pensados para situaciones especiales, por ejemplo para el uso de guantes.  Un gatillo demasiado "suave" puede producir disparos casi accidentales... accidentales en el sentido que, en una montería, encañonamos a la res, la seguimos y con la "tensión" del momento, si la presión del gatillo es demasiado suave... quizás disparemos antes de tiempo...  en gatillos regulables una regla que funciona bien es, armar el rifle en vacio y tratar de sujetar el rifle por el gatillo (haciendo presión sobre el).  Si con el peso del rifle, el gatillo no produce el disparo, el gatillo esta demasiado "tenso".  Y eso suponiendo que el rifle está en torno a los 3 kilos...  Personalmente, a mi me gusta 1 kilo de presión.

• Anchura/tacto.  Un gatillo demasiado fino terminará siendo molesto para ejercer los disparos y seguramente impreciso.  El tacto es muy importante también.  Cada vez vemos mas gatillos con algo de "rebaje" o tacto con mas "grip" (agarre).  yo prefiero los gatillos relativamente anchos, planos y con agarre, incluso acanaladuras.
• Intermedio o trasero.  El gatillo intermedio es aquel que se encuentra en el medio del guardamontes, el trasero es aque que casi se apoya en la parte trasera del guardamontes.  En los rifles de caza, seguramente el más extendido es el gatillo trasero.
• Cada vez nos encontramos mas gatillos "curiosos", como por ejemplo el caso de Marlin XL7, que disponen de una pieza central o fleje que nos permite ese recorrido "extra" que comentábamos en la primera categoría.  Es una solución interesante.

En el caso de recechos, buscamos un gatillo lo mas preciso posible, con recorrido intermedio o corto, un punto de disparo seco y suave, con una presión mínima, normalmente muy finos para que la presión sea la mínima, bien por debajo del kilo, y por tanto no transmitamos movimiento al rifle, .

El gatillo en las escopetas - El arte de la repetición

Las categorías, aunque similares, no buscamos lo mismo:

• Recorrido.  Las escopetas mas "longevas", solían tener gatillos de recorridos largos...  a día de hoy, buscamos un recorrido corto, breve.  Nos debe permitir apoyar el dedo al comienzo del swing o movimiento de disparo y a la vez permitir un incremento de presión y avance del recorrido del gatillo hasta que se produzca el "breaking point".

El gatillo de la Beretta A391 Uklrika 2, seguramente uno de los mejores gatillos de escopeta

• "Break Point" o punto de disparo.  Este ha de encontrarse al final de este recorrido corto.
• Presión.  Buscamos una presión baja.  En escopeta realizaremos bastantes mas disparos que en un rifle, por lo que necesitamos una presión suave, sin llegar a un pelo, pero hablamos de menos de 1 kilogramo.
• Anchura/tacto.  Lo mas apropiado es un gatillo suave y curvo.  Que nos permita deslizar el dedo suavemente.
• Doble Gatillo.  En las yuxtapuestas (paralelas) suele ser muy habitual encontrarnos doble gatillo.  Las armas antiguas solían disponer de gatillos muy afilados y en muchas ocasiones, demasiado próximos, lo que a veces dificultaba el disparo del segundo tiro, e incluso en ocasiones, terminaba en "guitarra" (disparar los dos caños a la vez).  En las paralelas modernas, tenemos el gatillo delantero articulado, que implica que se puede mover hacia adelante, con lo que nos evitamos los roces del nudillo con el gatillo delantero.

La tecnología y la caza.. ¿Fuerzas Opuestas?

Es indudable que la caza recoge muchas veces la herencia "militar", sea en armas, tejidos, óptica, munición...

La tecnología avanza de manera inexorable y si comparamos la óptica o la munición, o los materiales de las armas de hace 100 años con los ahora, la evolución es muy llamativa... o no?  Pero ¿es siempre  aplicable tanta evolución?
Existen ópticas por infrarrojos, térmicas, sistemas de guiado automático, sensores de movimiento, proyectiles "inteligentes", prendas quitavientos, térmicas, impermeables... y un largo etcétera...  Pero realmente ¿son aplicables todos estos avances a la caza?  ¿Dónde ponemos el límite?

Las Armas

Las nuevas Culatas

Es cierto que las maderas de las armas de caza han evolucionado... en muchos casos a peor por el precio de determinadas maderas o la disminución del número de artesanos... Es verdad que ahora se han "socializado" los precios, haciendo que sea asequible adquirir un arma con unas maderas aceptables a un precio razonable.  He visto armas antiguas con maderas increíbles, rozando con la joyería, de una belleza sin igual... También he visto armas antiguas baratas y la madera, ya sobadisima, era tosca, blanda y sin formas... con su romanticismo, pero de ergonomia nula.
Lo que si ha evolucionado muchísimo son los materiales sintéticos como por ejemplo los encontramos en las culatas sintéticas, ultra resistentes, firmes pero elásticas, a toda prueba.  De una ergonomia increíble, hacen mucho mas fácil el encare y el disparo cuasi-perfecto.

Los materiales y los mecanismos 

Aquí es donde hemos tenido mas altibajos.  Es imposible no aceptar que la calidad de los aceros ha evolucionado, disminuyendo peso y aumentando resistencia y tolerancia a la cantidad de disparos.
Es verdad que estos aceros fueron evolucionando, pero hacia 1960-1970, muchas empresas comenzaron a trabajar con aleaciones nuevas.  Estas aleaciones eran hasta un 50% mas ligero y prometían mayor resistencia...  No siempre ha resultado siendo así.  Muchos cazadores eligen acciones antiguas sobre otras modernas por su calidad y fiabilidad.
En el caso de cerrojos en rifles, ahora mismo tenemos una convivencia fantástica entre cerrojos ultra rápidos y rectilíneos como los Blaser o los Merkel, conviviendo con las acciones Mauser o Remington...
En escopetas, nos pasa igual, con una evolución en los sistemas de las escopetas semiautomáticas, conviviendo con las paralelas de pletina larga.   Tengo la suerte de contar con alguna escopeta con mas de 60 años y la calidad y cierres son magnificas... y alguna "moderna" de hace menos de 5 años... el tacto es distinto, pero ambas son de altísima calidad.

Cerrojo rectilíneo Blaser

Los cañones

Se ha evolucionado muchísimo.  Es verdad que hace 100 años también se fabricaban cañones de altísima calidad, pero a un precio francamente elevado.  A día de hoy, casi se puede decir que no hay cañón malo.  Entendiendo por malo, aquellos cañones que se recalentaban y deformaban de manera muy notable, haciendo que nuestros disparos fuesen inconsistentes a partir del 2 disparo consecutivo.

Cañón acanalado y freno de boca (el primero resulta más ligero y el freno reduce retroceso)

Un avance que en España no es legal aunque quizás fuese bueno debatirlo son los supresores o silenciadores.  Realmente son una ventaja para el cazador y además eliminarian la famosa sordera del cazador, aunque los mal llamados "cazadores furtivos", deberían llamarse a secas furtivos, o ladrones, o asesinos a sueldo sin mas, se aprovecharían (o es que no lo hacen ya?)...

La óptica

Visión térmica 

Visión nocturna (infrarroja) 

Seguramente este es el campo donde mas se ha evolucionado.  Los visores de hoy, ganan en peso, resistencia, alcance, nitidez, claridad...  Todo.  Tenemos visores por infrarrojos que hacen la visibilidad completamente nítida en ausencia de luz.
También tenemos visores térmicos, capaces de detectar vida por la diferencia de temperatura con el ambiente.
Sistemas de puntería automáticos en base a sensores de movimiento...
Tenemos las muy difundidas cámaras con visión nocturna, sensor de movimiento y capacidad de streaming de las imágenes...

La Munición

Mejor pólvora, munición estudiada hasta la saciedad para conseguir el mayor efecto con el mínimo coste.  Más precisión, mas potencia...

Punta Barnes sin plomo

La Ropa

En este campo la verdad es que la evolución ha sido impresionante, prendas mas ligeras, mucho mas versátiles, con un camuflaje que nos hace casi invisibles...
Aún recuerdo las antiguas botas de cuero que se les untaba grasa de caballo para impermeabilizarlas con calcetines de lana gruesa... Los pantalones de pana, los chaquetones que cuando llovía pesaban casi el doble... los míticos Barbour...  Ahora tenemos muchas prendas que son 3 prendas en 1... forro polar, quitavientos e impermeable, todo transpirable...

La protección 

Seguramente el elemento menos valorado de todos.  Hemos avanzado de manera impresionante en protección auditiva (finalmente tan en voga estos días) con cascos electrónico que aumentan el sonido, pero a la vez, nos protegen de las detonaciones de las armas.  A día de hoy la marca mas extendida en España es Peltor que fabrica productos de gran calidad, pero a un precio a veces demasiado alto para el bolsillo medio del cazador.

Tenemos las gafas protectoras...  no cualquier gafa de sol es protectora!  Es más, unas gafas de cristal son altamente peligrosas en caso de romperse el cristal por un impacto.  Las gafas de protección están fabricadas en materiales resistentes a los golpes y que en ningún caso se fragmentarán en pequeños trozos que puedan entrar en los ojos.

Prendas de alta visibilidad.  Aunque siempre hemos pensado (erroneamente) que lo mejor es ir vestido de camuflaje para una montería, realmente los animales distinguen el movimiento cuando están en carrera y el camuflaje pierde su razón de ser (aunque es adecuado para recechos o aguardos).  Hoy en día es aconsejable, además de obligatorio, portar prendas de alta visibilidad en batidas y monterías.

Las comunicaciones 

Sin duda uno de los aspectos donde hemos ganado mas aprovechandonos de las nuevas tecnologías.  Podemos aprender y estudiar desde nuestra casa, vemos muchos videos y lances de caza que antes solo eran tradición oral, nos avisamos de citas importantes sobre la caza y nos enteramos de opciones a cazar lejos de nuestro ámbito.

Y la cuestión es, ¿debemos adoptar toda la nueva tecnología a nuestra pasión?  Me considero un cazador tradicional pero abierto a muchos de los avances de la tecnología...  Prefiero una prenda moderna a una antigua, o un cañón que no se recaliente y desvíe las trayectorias de mis disparos, o una munición letal al primer impacto.. Pero no me gustan aquellos avances que le restan sentimiento o emoción al lance, un visor nocturno o un visor térmico son una ventaja que hace que la batalla que se establece entre el cazador y la presa en una espera, sea hasta "demasiado fácil"...
Yo me quedo con aquellos avances que permiten al cazador ser el dueño de sus aciertos y de sus fallos, de aquellos avances que hacen que nuestra salud no se resienta y sobre todo, aquellos que mejoran la seguridad...